Solo para elegidos

Para los que vivimos y/o laburamos en Capital Federal es casi una epopeya poder conseguir uno y definitivamente, somos pocos los afortunados que sabemos donde se pueden conseguir por estos lados.

Los conocí hace unos tres años gracias a dos compañeros de laburo que, como no podía ser de otra manera, son de zona sur. “Probalo” me decía uno, “es el mejor alfajor, lejos” explicaba el otro.

Para ser sincero, no les llevo mucho esfuerzo convencerme. Fui del quinto piso, donde queda mi oficina, hasta el sexto, donde esta la maquina de golosinas, contando las moneditas. Cuando, finalmente, pude degustarlo, comprobé que lo que decían mis amigos era cierto.

La empresa explica que el motivo por el cual no llegan, masivamente, a Capital, es porque “somos una fábrica chica y no damos a basto con los pedidos”

Desde aquel día adopte al Capitán del Espacio como mi alfajor preferido. No hay nada que se compare a la gran creación de Don Ángel de Pascalis.